Conflictos

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 Podemos diferenciar entre tres niveles a la hora de segregar los tipos de conflictos, que son:

• Conflictos comunes
• Conductas disruptivas en el aula
• Conductas antisociales 

 El primer nivel es fácilmente tratable en el entorno escolar, mientras que los otros dos necesitaran de la intervención de especialistas de la materia para tratar de obtener un resultado positivo.

Puesto que nosotros hablamos del ámbito educativo, me voy a centrar en los conflictos comunes, entre los que podemos observar por ejemplo:

• Insultos
• Malos entendidos
• Faltas de respeto verbales
• Rumores
• Comentarios despectivos

Para resolver estos conflictos podemos tener en cuenta la participación de un mediador. Es importante destacar que un conflicto no tiene por qué ser algo negativo siempre, más bien dependerá de la forma en que se consiga resolverlo. Me atrevería a decir incluso, que si se resuelve de manera apropiada ambas partes resultaran reforzadas, aunque para esto muchas veces es vital la participación del mediador.

El mediador debe conocer todas las características del conflicto por ejemplo entre quién se da, qué motivó el conflicto, en qué punto se encuentra ahora etc.

En la resolución de los conflictos escolares resulta de más ayuda la participación como mediador de un alumno , ya que los conflictos entre iguales se resuelven de forma más efectiva que si participa un adulto
De forma que un alumno mediador deberá contar con características y algo de formación para ser capaz de :Acoger al alumnado recién llegado, detectar posibles conflictos y discutirlos antes de que se agraven, derivar los casos más conflictivos a adultos, que serán aquellos donde se den por ejemplo agresiones físicas.

Finalmente otro punto importante es, saber cómo tenemos que actuar en caso de un conflicto, debemos defender nuestro punto de vista de una forma asertiva y no agresiva. Utilizar un lenguaje verbal y no verbal adecuado. Ser capaz de pactar y llegar a acuerdos y aceptar críticas constructivas